Tuesday, September 14, 2010

GUSTO CULPABLE

[Sí, gritando] o de la peda más barata del universo.

O por lo menos hasta ahorita, en un rato se retoma la salida. Pero de regreso a la peda más barata del universo [Que sigo relativamente peda, disculpen cuando la cague con las letras]. Fui a las Barricas, en Gabino Barreda y no se qué otra calle, llegamos, platicamos, empezó el gusto culpable, pero aún leve. Bebí, bebí, bebí. Bebí Perla Negra que no era Perla negra porque no era Red Bull, la cosa que se suponía era Red Bull era algo que lucía como Coca con agua mineral.

Luego Jack Daniels con squirt, pero ohhhhh, ahí descubrí que en ese lugar no sirven mamadas, era el whisky con squirt más fuerte que he tomado en mi vida, aún más fuerte que los que yo me he servido muy peda. Luego no me acuerdo que fue, acordé con C. pedir algo que no tuviéramos ni puta idea de qué era, pedí algo que no recuerdo cómo se llama, quiero decir algo-Stumbler, pero no se llamaba así, era ron con jugo de piña, granadina y no-se-qué-putas-más.

Seguí con el pedir desconocidos y pedi un moradito, que resultó ser Vodka con jugo de uva [Cada cosa supe qué era cuando me lo traían y preguntaba, sí, como toda una adolescente], ese estuvo chafa porque no tuvo cosas desconocidas. Ya ahí perdió el chiste el elemento sorpresa y pedí una piña colada. Comí ahí tacos de suadero y de pastor que los de pastor no estaban chidos. Pero tengamos en cuenta que fueron cinco [¿Cinco?] bebidas, incluyendo un "perla negra" [entre comillas porque no tenía Red Bull, y digo incluyendo porque suelen costar másde cien pesos] y sí, al final pagué cientocuarenta pesos.

Se que me correspondía más, o de hecho no [Nunca vi la cuenta], pero lo asumo, pero eso pagué, yo dí mi tarjeta [Iba dispuesta a dar seiscientos pesos], me dijeron que no mamara, dí varo, tomaron cien pesos, luego veinte de propina, luego otros veinte de propina y sí, salí peda y manejé y gracias-dios porque no había alcoholímetros. Y sí, todo era muy fuerte [menos el moradito], la piña colada sabía cabrón a alcohol, tanto que opacaba el dulce, el algo-stumbler sabía a alcohol y no a los colores mágicos que tenía, y el whisky sabía tanto a whisky que me tardé aaaaaños tomándomelo. No-pinches-mames.

Me enteré de cosas cabronas pero cagadas de gente de la chamba antigua [Hasta dije "no mames" a todos muy fuerte (Cuando aún no estaba peda)], bailé salsa, comí cacahuates, reí, reí, reí y desarrollé un gusto culpable en la peda [Esperemos un putazo leve por decir eso].

Punto, es momento de volver a partir para seguir, fue rico el lugar y eso me dió ganas de sguir bebiendo, imrpovisaremos hasta llegar algo decente. Buenas noches.

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