Salva vino
A visitarme, llegó el viernes y se va mañana y todo ha sido del bien. Hemos sido amigos mucho tiempo, más de dos terceras partes de mi vida, nos hemos visto felices y estúpidamente felices, tristes y estúpidamente tristes, enojados y estúpidamente enojados, borrachos y estúpidamente borrachos, emocionados y estúpidamente emocionados y así la lista sigue para prácticamente todo. A lo que voy con esto es que después de tantos años nos conocemos en prácticamente todas las situaciones posibles, no nos habíamos visto como en un año pero hablamos varias veces a la semana y se que muchas cosas no tengo que decírselas para que las sepa.
Ayer fui a dejar a Telera, no la voy a ver una semana y todo fue bien triste. Cuando vivía con Nugget y sin Pepe alguien me preguntó qué extrañaba en ese momento y yo dije que a Pepe porque siempre habían estado los dos perros juntos, sí, eran dos pero eran una sola entidad, cuando no tenía a ninguno los extrañaba pero los iba a visitar seguido, después de tener a Nugget dejé de ver a Pepe como dos meses y ahí lo extrañé.
Cuando se murió Beso fue igual, Había pasado varios años con Beso Y CON Lexie, siempre salían juntas, siempre dormían juntas, entonces los primeros días de sacar a Lexie era feo porque sólo acentuaba que faltaba un hurón, porque siempre había habido una entidad y era evidente que estaba incompleta.
Pasa lo mismo con Telera. Pasear dos perros me hace topar que falta uno que corra en desesperación total, y sentarme en el sillón con Nugget encima y Pepe a un lado hacen evidente que falta Telera queriendo subirse a mis piernas o intentando besarme la cara antes de sentárseme. El tener dos perros sólo hace más evidente que falta uno por eso, porque hay dos cuando debería haber tres. Y todo es peor porque en el último mes había pasado más tiempo con los perros que de costumbre, creo que ahora pasan más tiempo solos, o por lo menos el tiempo que yo voy a trabajar es tiempo que, casi (CASI) siempre, pasan en la casa solos y por eso es que el tiempo que no trabajo es tiempo que paso con ellos, si voy a comer veo que vayamos a algún lugar pet friendly, vamos hasta los días que he ido por una chela hemos quedado en ir a algún lugar en el que haya mesas afuera para que no haya pedos. La cosa es que me he acostumbrado más a estar con perros que antes.
Ayer mientras regresaba a mi casa caminando con Pepe y Nugget me puse bien triste mientras caminaba con ellos, llegué a mi casa y Salva estaba haciendo la "cena" ("Cena" porque era bien temprano para cenar cenar, pero pasamos el fin de semana comiendo a sus horas y no a las horas normales), llegué y sólo me dijo "veme", lo vi y sólo me dijo "Vamos a que te abrace porque ya se y no te puedo decir nada." y eso hicimos, nos acostamos media hora en mi cama en silencio completo.
Y estaba triste a pesar de que es sólo una semana porque pues igual falta algo, pero Salva estaba ahí y me abrazó justo el tiempo necesario para que ya no me sintiera tan de la verga.
Pasa lo mismo con Telera. Pasear dos perros me hace topar que falta uno que corra en desesperación total, y sentarme en el sillón con Nugget encima y Pepe a un lado hacen evidente que falta Telera queriendo subirse a mis piernas o intentando besarme la cara antes de sentárseme. El tener dos perros sólo hace más evidente que falta uno por eso, porque hay dos cuando debería haber tres. Y todo es peor porque en el último mes había pasado más tiempo con los perros que de costumbre, creo que ahora pasan más tiempo solos, o por lo menos el tiempo que yo voy a trabajar es tiempo que, casi (CASI) siempre, pasan en la casa solos y por eso es que el tiempo que no trabajo es tiempo que paso con ellos, si voy a comer veo que vayamos a algún lugar pet friendly, vamos hasta los días que he ido por una chela hemos quedado en ir a algún lugar en el que haya mesas afuera para que no haya pedos. La cosa es que me he acostumbrado más a estar con perros que antes.
Ayer mientras regresaba a mi casa caminando con Pepe y Nugget me puse bien triste mientras caminaba con ellos, llegué a mi casa y Salva estaba haciendo la "cena" ("Cena" porque era bien temprano para cenar cenar, pero pasamos el fin de semana comiendo a sus horas y no a las horas normales), llegué y sólo me dijo "veme", lo vi y sólo me dijo "Vamos a que te abrace porque ya se y no te puedo decir nada." y eso hicimos, nos acostamos media hora en mi cama en silencio completo.
Y estaba triste a pesar de que es sólo una semana porque pues igual falta algo, pero Salva estaba ahí y me abrazó justo el tiempo necesario para que ya no me sintiera tan de la verga.
No comments:
Post a Comment